Entre las medidas financieras que se han tomado, se encuentran:

1.Una línea de avales para garantizar la liquidez de autónomos y empresas con el objetivo de apoyar al tejido empresarial garantizando el acceso a la financiación necesaria para mantener la actividad y el empleo.

Esta línea de avales será de 100.000 millones de euros y estará destinadas a empresas con problemas provocados por esta emergencia sanitaria. De esta forma, el Gobierno garantizará hasta el 80% de los préstamos que soliciten las empresas y los autónomos a los bancos para poder afrontar el pago de salarios, circulantes, facturas o ,simplemente, que tengan necesidades de liquidez.

El primer tramo avalará operaciones por un importe de hasta 20.000 millones y, al menos, la mitad tiene que destinarse a pymes (con menos de 250 trabajadores) y autónomos.

La segunda parte de esta línea de avales se destina a empresas medianas y grandes y se subdivide en dos partes. Cuando se trate de nuevos créditos, la garantía será de hasta el 70% y cuando se renueven préstamos que vayan a vencer en los próximos meses, la cobertura del Gobierno alcanzará el 60% del importe.

El Ejecutivo también ha dejado claro que no cancelará los créditos anteriores al coronavirus, ya que la norma aclara que los solicitantes no pueden haber entrado en morosidad a 31 de diciembre de 2019 ni en procedimiento concursal a 17 de marzo de 2020

2. El aplazamiento extraordinario del calendario de reembolso, en los préstamos concedidos por la Secretaría General de Industria y Pyme.

Los beneficiarios de concesiones de los instrumentos de apoyo financiero a proyectos industriales podrán solicitar el aplazamiento del pago de principal y/o intereses de la anualidad en curso, siempre que su plazo de vencimiento sea inferior a seis meses a contar desde la entrada en vigor de este Real Decreto-Ley, cuando la crisis sanitaria haya originado en dichos beneficiarios periodos de inactividad, reducción en el volumen de las ventas o interrupciones en el suministro en la cadena de valor que les dificulte o impida atender al pago de la misma.

Para estimular el desarrollo industrial se ha aprobado un marco normativo para la financiación de proyectos de inversión para la mejora de la competitividad industrial, la sostenibilidad, la transformación digital o que contribuyan a la reindustrialización. Este estímulo adoptaba la forma de apoyo financiero a proyectos industriales en diferentes programas regulados mediante sus respectivas órdenes de bases a través de la concesión de préstamos a largo plazo.

La irrupción del COVID-19 está afectando a la cadena de valor de amplios sectores industriales, especialmente internacionalizados y está incrementando el coste de la producción debido al mayor coste logístico de importación de piezas y suministros. Por ello se proporciona a los operadores económicos, medidas de apoyo financiero para poder compensar, en lo posible, los descensos de sus ingresos ordinarios y dotarse de liquidez para hacer frente a sus obligaciones.

En este sentido, se considera esencial que las empresas que hayan recibido apoyo financiero a la inversión industrial a través de préstamos de la Secretaría General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa puedan solicitar el aplazamiento de reembolso.

La Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV):

La Autoridad Europea de Valores y Mercados, ESMA, ha realizado, asimismo, algunas recomendaciones a los participantes del mercado. Acceso a la información.