La venta online ha llegado para quedarse. El proceso de compra de los clientes está sufriendo un profundo cambio y el e-commerce, es decir, el comercio electrónico, está comenzando a  imponerse al físico. Cada vez son más los grandes y pequeños empresarios que posicionan sus productos en la red mediante un dominio web. 

El negocio online presenta un gran atractivo para el empresario. Por un lado, el consumidor puede acceder a él en cualquier momento al encontrarse abierto las 24 horas y por otro, las barreras geográficas con el cliente están totalmente suprimidas. Sin duda, en un mundo globalizado cada vez más interconectado, supondrá que aquellos que no apuesten por la digitalización terminarán desapareciendo. 

La venta online es una realidad sobretodo cuando hablamos de la venta de productos, pero en el caso de empresas de prestación de servicios como podría ser un despacho de abogados, ¿estamos verdaderamente avanzando? o quizás, ¿algo rezagados?

Un nuevo enfoque.

Esta transformación que está sufriendo “la compraventa” está provocando que el concepto que tenemos de los locales a pie de calle se renueve, y comiencen los empresarios a darle ese nuevo enfoque. El stock de los productos pasará de estar en los lineales de las tiendas físicas, a establecerse en grandes almacenes, pues los locales comerciales solo servirán como reclamo publicitario para que el consumidor que necesite ver un producto lo pueda analizar y tocar, siendo su única función de marketing y exposición, no de venta.

Pero, ¿hay otra alternativa para el empresario?

Si, en lugar de una web propia, el empresario podría posicionar su negocio en un “Marketplace” ¿Aun no sabes lo qué es? Pues seguramente habrás comprado en alguno de ellos, el más conocido es “Amazon”. Podríamos definir “Marketplace” como una web que pone en contacto a compradores y vendedores, pudiendo asemejarlo a una gran superficie, pero online. Estas plataformas virtuales, están adquiriendo cada vez mayor importancia, ya que un cliente puede no comprarte un producto simplemente porque no conoce tu posicionamiento web o por falta de confianza; en otras palabras, si no estás en la web no existes. La confianza es algo prioritario para el cliente online, ya que para realizar una compra debe sentirse seguro. Básicamente, es por esto último el porqué del protagonismo que estos “Marketpalce” están adquiriendo, pues es lo que decide finalmente que el cliente materialice la compra, disipando cualquier duda.

La confianza en los “lugares virtuales”.

En cuanto a lo que nos compete a nosotros, los abogados, los lugares virtuales deben cumplir una serie de requisitos legales que en posteriores entradas al blog iremos desglosando y analizando, pero como un requisito previo de partida deberíamos perseguir acreditar ese “lugar virtual” como un “Trusted shop”. Esto es un doble distintivo de garantía económica y de calidad. En cuanto a la garantía económica, cubre hasta 2.500 € por pedido, y en lo que ser refiere a la calidad, para que en un website aparezca el signo es necesario que previamente se haya evaluado y demostrado el cumplimiento de todos los requisitos legales y estándares de calidad.

Así que, cuando veas este distintivo,  no dudes y ¡Haz clic en comprar!